Reseña #20: La prisión de los espejos de Rafael Martín Masot

La prisión de los espejos

Rafael Martín Masot
Editorial Baile del Sol
Narrativa, novela
Páginas: 234
ISBN: 978-84-92528-98-1
Precio: 14 €

¿Cómo reaccionaría una persona normal si, por azares de su profesión, llegase a tener pruebas de una monumental confabulación entre políticos corruptos, tiburones de las finanzas y distinguidos miembros de la más exquisita burguesía de su ciudad? El psicólogo Marc Viadiu puede que no sea una persona normal, pero el descubrimiento de esta trama de poder, sobornos, cohechos y maldad que no se detiene ante nada y es responsable del asesinato de uno de sus pacientes, lo lleva a una arriesgada determinación. Se presenta en la apartada y lujosa mansión de uno de los dirigentes de la perversa, "honorable sociedad" y le expone sus condiciones. Es un pacto que, sabe, "ellos" no van a aceptar.

El encontrarnos con una novela de un autor tan joven nos da a entender que, tanto la historia como es estilo de narración, van a estar muy inmaduros. Pero cuál ha sido mi sorpresa que no ha sucedido de esta manera. Me ha encantado. Es cierto que a un autor tan joven le faltan muchos años de madurez, pero esto no quita que esta novela es como es.

La historia transcurre en la actual Barcelona y arranca con un joven pero cansado del trabajo Marc Viadu. En su profesión como psicólogo y en una de sus sesiones con uno de sus pacientes descubre que la corrupción entre los políticos y empresarios es tangible y la podemos encontrar a la vuelta de la esquina. Aquí comienza el chantaje por parte de Marc a ciertas personas con mucho poder, lo cual originará ciertas circunstancias que lo llevará a distintos puntos de España para escapar de las garras de la secreta “Organización”. Todo ello con ayuda de diferentes personajes que aparecerán poco a poco en la historia.

Hasta la mitad del libro la historia la va contando el protagonista, Marc Viadu, pero cuando llegamos al ecuador, aparece Teresa Muntal que será la encargada de seguir contando la historia en primera persona hasta el final. Esto favorece bastante la narración ya que nos ayuda a tener otro punto de vista y a engancharnos más, ya que obviamos los pensamientos del protagonista. También hay un equilibrio entre diálogo y narración haciendo que la lectura sea amena y fluida. Hay que tener en cuenta las acciones emocionales que esta historia produce en el lector, por ejemplo, a mí me ha producido muchos: “¡Ay, Dios!” y “No puede ser…” haciendo que la trama sea aún más interesante y emocionante.

Algo que no me ha gustado ha sido el final, no sé si será porque yo no lo he entendido o porque no me he enterado, pero me ha dejado con muy mal sabor de boca. No he llegado a comprender del todo lo que el autor ha querido reflejar… ha sido tan escueto que me he hecho un lío en la cabeza y me lleva a preguntarme infinidad de preguntas (que no las voy a mencionar para no revelar el final).

En conclusión, con una sutileza en su estilo narrativo y con una historia realmente interesante, el autor ha conseguido que esta novela sea muy diferente a las historias de corrupción a las que estamos acostumbrados.